martes, 2 de diciembre de 2008

Una serie divertida y entretenida que no puede faltar en este blog


“INUYASHA”

Kagome, una chica de 15 años que vive en un antiguo templo, busca a su gato en la zona del pozo, pero algo tira de ella desde dentro. Cuando sale del pozo ya no se encuentra en su casa, aparece en el Japón de hace 500 años, en plena era Sangoku, cuando lo mágico es común y los demonios conviven con los humanos. Kagome es la reencarnación de Kikyo y en su interior se encuentra la “Esfera de los Cuatro Espíritus”, esta joya posee la peculiaridad de incrementar los poderes de hombres y monstruos para el bien o para el mal, por lo que todos los demonios la desean.

Un demonio-cienpiés ataca a Kagome, consiguiendo para sí la perla. Para salvar su vida, Kagome libera a Inuyasha, un medio demonio que fue atrapado por Kikyo y que termina derrotando a su adversario. Pero Inuyasha desea la joya también, por lo que Kaede le coloca un Rosario de Obediencia con el que Kagome puede controlar a Inuyasha siempre que quiera ordenándole que se siente. Kagome vuelve a perder la esfera y al intentar recuperarla estalla en muchos pedazos que se dispersan por todos lados.

Así empieza esta serie que
cuenta las peripecias de Kagome e Inuyasha para encontrar los fragmentos de la joya. A lo largo de la historia, Kagome e Inuyasha empiezan a presentar sentimientos profundos entre ellos. Pero en la antigüedad Inuyasha y Kikyo, antes de intentar matarse el uno al otro, se amaban profundamente y éste no es capaz de olvidarse de ella.

En el trayecto de su aventura se les unen nuevos personajes: la cazadora de yokuais Sango, con su mascota Kirara, que es una Bestia Sagrada que puede transformarse en un gato gigante; el sacerdote budista Miroku, que intenta conquistar a Sango pero siempre se propasa recibiendo una bofetada de “premio”; el pequeño Shippo de cola de zorro que tiene pocos poderes; la pulga Myoga; y el hombre-lobo Kuoga, que lucha con Inuyasha por el amor de Kagome.



Lucha, amor y magia, el cóctel perfecto para una serie de éxito.

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